lunes, 25 de mayo de 2009

ORACIÓN PARA UNA OPERACIÓN


ORACIÓN PARA UNA OPERACIÓN.

Padre mío,
Tú eres mi refugio. Tú sólo.
Clamo a ti, Señor, para que me traigas salvo a través de esta operación y me des curación y ayuda.
Guía la mano del cirujano, para que la operación tenga éxito. Te doy gracias, porque sé que los doctores son tus instrumentos y ayudantes. Nada puede sucederme, excepto que Tú, Padre mío, en Tu Amor, lo hayas decidido para mí.
Así que tómame en tus brazos ahora, durante las próximas horas y los próximos días. Puedo confiar en Ti; puedo reposar en Ti, completamente, aun en los momentos que estaré inconsciente. Hazme proceder en toda esta operación de tal manera que no traiga deshonor en Tu nombre. Si por Tu gracia me despierto después de la operación, que mi primer pensamiento y mis primeras palabras sean para darte gracias.
Yo entrego todo mi ser y mi vida a Ti en esta operación. Que toda mi vida venga a tu luz. No quiero ir a esta operación sin confesar todos mis pecados a Ti, y en cuanto sea necesario a otros también. Quiero recibir Tu perdón.
Mi Señor Jesús, espero todo lo que va a sucederme con el conocimiento consolador de que soy tuyo y que Tú eres mío. Nada puede separarme de tu amor, en vida o en muerte. Amén

Oraciones que valen la pena recordar y orar

ORACIÓN CUANDO HA HABIDO UN ACCIDENTE

Mateo 9:12-13.

Señor y Dios mío, Tú has usado este accidente para darme una escalofriante per benèfica experiencia. Me has recordado también que es posible ser quitado de esta vida y de esta tierra en un simple momento para estar ante tu trono de juicio.
Tú permitiste este accidente a fin de darme un fuerte aviso, como un clarín de trompeta para despertarme. Estás exhotándome a vivir mi vida presente a la luz de la eternidad; pero, sin embargo, Tu bondad paternal ha velado sobre mí y me ha salvado de la muerte. Te doy gracias por esto, Señor. Yo sé que ni un solo cabello de nuestra cabeza cae sin tu voluntad. Tú quieres que lo que me ha sucedido sirva sólo para bien; me haga reconocer en dónde reside mi falta, y por qué ha ocurrido esto.
Perdóname por las veces cuando el apresuramiento de la vida me ha puesto fuera de mí y he obrado locamente, no guardando las reglas del tráfico, trayendo daño o perjuicio a otros. Si en este particular accidente otra persona fue más culpable que yo, guárdame de acusarle y de sentirme resentido en
contra de él; ayúdame a perdonarle desde el fondo de mi corazón para que yo pueda experimentar cada día tu perdón.